Mucha gente asume que el entrenamiento del cajó en un cachorro es cruel, pero si entiendes un poco sobre la psicología canina, podrás ver cómo el entrenamiento del cajón de tu perrito perdiguero puede ser una experiencia positiva.
El entrenamiento del cajón es un procedimiento relativamente simple, que requiere la misma persistencia y paciencia que se aplicaría a cualquier entrenamiento canino.
Los beneficios del cajón o jaula en tu cachorro Retriever
Si se realiza correctamente, el entrenamiento del cajón puede ser muy bueno para ti y tu perro.
- Seguridad. Un perro que está acostumbrado a ser embalado es más fácil de transportar y se siente más seguro.
- Consuelo. Una caja puede ser una fuente de consuelo para tu perro. Puede ser su lugar especial y su refugio.
- Conveniencia. Cuando estás ocupado, una jaula es un buen lugar para confinar a tu perro para mantenerlo fuera de las travesuras.
- Capacitación. El entrenamiento del cajón hace que el entrenamiento en general sea mucho más sencillo.
- Límites de mascar. A todos los perros les encanta masticar. Si deja los juguetes para mascar en el cajón de tu perro, él podrá masticar esos y no tus muebles o tus zapatillas.
Los si y no del entrenamiento del cajón de tu cachorro Retriever
Hacer
- Compra una caja de inmediato. Ten la caja lista antes de traer a tu cachorro a casa.
- Obten el tamaño adecuado. Compra una caja lo suficientemente grande para que tu perro completamente crecido quepa y pueda estirarse y girar adentro.
- Déjalo en el mismo lugar. Los retrievers son criaturas de hábito.
- Deja unos juguetes en la jaula.
No Hacer
- Castigarlo con la caja. Tu cachorro necesita asociar la caja con cosas positivas y no con el castigo.
- Exajerar el tiempo en la caja. Limita el tiempo que tu perro pasa en el cajón hasta un par de horas por vez y nunca más de 4 horas.
- Alimentar a tu cachorro dentro de la caja. A los perros no les gusta ensuciar donde duermen y la alimentación conducirá a esto.
Tan pronto como recibas tu cachorro en tu casa es un buen momento para comenzar el entrenamiento del cajón.
- Posición. Coloca la caja en algún lugar donde puedas mantener un ojo sobre él, pero no en una zona de alto tráfico o demasiado ruidosa.
- Golosinas. Coloca una galleta para perros en el interior y pon a tu cachorro en la jaula, dejando la puerta abierta. Que sea una experiencia positiva, que le permita explorar la caja sin ningún tipo de presión.
- Repetición. Sigue llevando a tu cachorro de nuevo a la caja durante todo el día y atrayéndolo con una golosina o un juguete.
- Alabanza. Alábalo cuando tu cachorro entre en la jaula y juegue en la caja, de manera entusiasta.
- Aclimatarse gradualmente. Cuando él haya estado dentro y fuera de la caja un par de veces, la próxima vez que entre, cierra la puerta sin hacer ruido y déjalo allí durante unos minutos. Aumenta gradualmente el tiempo que pasa en la caja.
- Momento. Tan pronto como saques a tu cachorro fuera de la caja, debes tener la correa lista para llevarlo fuera, a ir “al baño”.
Las cajas pueden ser de gran utilidad, así que tómate tu tiempo en el entrenamiento del cajón, y tanto tú como tu cachorro Retriever disfrutarán de los muchos beneficios.